La UE avanza hacia la prohibición de dispositivos móviles chinos
Publicado el 26.11.2025
La Comisión Europea está aumentando la presión sobre los países de la UE para que vayan más allá de las recomendaciones y prohíban legalmente a los gigantes chinos de las telecomunicaciones Huawei y ZTE en las redes 5G.
Hasta ahora, países como España, Grecia y Chipre han seguido utilizando sus equipos, generando normas dispares en todo el bloque. Bruselas quiere ahora un marco único y obligatorio para eliminar esta brecha.
Qué está cambiando y por qué
La Comisión sostiene que utilizar proveedores de alto riesgo en las redes críticas de Europa podría amenazar la seguridad y debilitar la independencia estratégica de la región. Muchos Estados miembros han sido lentos o inconsistentes en aplicar restricciones. Convertir la prohibición en una ley a escala de la UE crea un enfoque unificado y exigible, en lugar de una orientación voluntaria.
Para los observadores de mercados y comercio, esto va más allá de la política de telecomunicaciones: señala un cambio más profundo en el enfoque a largo plazo de Europa hacia China, uno de sus mayores socios de trading.
Riesgos para los mercados y el trading
La UE y China mantienen sólidos vínculos comerciales; China es el segundo mayor socio comercial de bienes de la UE. Una prohibición legal total sobre los proveedores chinos podría reducir las exportaciones chinas a Europa, ya que Huawei y ZTE perderían acceso a partes del mercado de infraestructura europeo. Pekín podría responder con aranceles, límites a la inversión o un acceso más lento al mercado para las empresas europeas.
Los operadores europeos de telecomunicaciones, que a menudo dependen de componentes chinos, podrían enfrentarse a mayores costes o retrasos en el despliegue del 5G. Las tensiones también podrían extenderse a otros sectores estratégicos como las baterías de vehículos eléctricos (VE) y las materias primas críticas, ampliando la brecha comercial.
Cómo podría afectar la represalia china al euro y al yuan
Para el euro, el principal riesgo aparece si China toma represalias contra la prohibición del 5G de la UE.
Una menor demanda china de productos europeos o un acceso más difícil al mercado para las empresas de la UE podría perjudicar las exportaciones y presionar a la baja al euro. Pero con el tiempo, una cadena de suministro más segura e independiente podría mejorar el sentimiento a largo plazo hacia la moneda europea.
Para el yuan, China podría responder a una menor demanda europea permitiendo que su moneda se debilite para hacer sus exportaciones más competitivas. Un yuan más débil podría hacer que el euro parezca más fuerte sobre el papel, pero eso no significaría que la economía europea esté mejorando. Si el comercio entre la UE y China se desacelera, también cae la demanda de yuanes para liquidaciones, lo que añade una ligera presión bajista sobre la moneda. En conjunto, el impacto en el EUR/CNY dependerá de hasta dónde esté dispuesto a llegar cada lado en la escalada.
- Un yuan más débil favorece a los exportadores chinos
- Las represalias chinas suponen riesgos para el euro
Conclusiones para el mercado
Lo que comenzó como un asunto de seguridad se ha convertido en un giro estratégico más amplio. Para los operadores y analistas, los puntos clave a vigilar son:
- La posible respuesta de China mediante aranceles, restricciones de inversión o política cambiaria.
- Cambios en las cadenas de suministro de telecomunicaciones e infraestructuras en Europa, identificando qué empresas se benefician y cuáles afrontan desafíos.
- Movimientos en EUR/CNY y EUR/USD a medida que los mercados descuentan riesgos y expectativas de crecimiento.
- Señales de que esto no es una medida aislada, sino parte de una reorientación duradera en las relaciones UE-China, con riesgos comerciales estructurales más profundos por delante.